Los entornos de ECE son uno de los lugares para ayudar a los niños pequeños a construir una base para una vida saludable. La programación de ECE de alta calidad puede tener un impacto positivo en el bienestar socioemocional, el rendimiento educativo, la salud y los resultados socioeconómicos de un niño más adelante en la vida. Promover la actividad física y fomentar comportamientos saludables apoyan a los niños durante el desarrollo temprano y más adelante en la vida. La primera infancia es un momento crítico para la prevención de la obesidad porque es una fase en la que los niños comienzan a desarrollar preferencias de gusto, aprenden a caminar y jugar, y copian los comportamientos que ven.
Al trabajar juntos para garantizar que existan estas oportunidades de capacitación de calidad, brindamos a los niños una mayor probabilidad de tener un peso saludable, prevenir enfermedades crónicas y mejorar el éxito académico y los comportamientos en el aula.